Gun-ho, recién casado, pasa su tiempo en casa con su suegro (Jungoo) mientras su esposa se va a trabajar. Para él, es una rutina diaria.
Hasta que un día, se emborracha y acaba durmiendo con su suegro, y continúan haciéndolo cada vez que su esposa no está.
Jungoo, por su parte, empieza a sentirse confundido por su creciente deseo de ser tocado por Gun-Ho.